Si un tema ha sido recurrente en esta columna, es el de las palabras parónimas. Son aquellas que guardan semejanza entre sí en la forma de pronunciarse o en la escritura. Esos parecidos son motivo de frecuentes confusiones al momento de escribir tales vocablos, como ocurre, por ejemplo, con lívido (adjetivo, igual a pálido) y libido (sustantivo, deseo sexual).
Les presento este grupo de palabras que presentan poca diferencia gráfica y ninguna en la pronunciación: haya (sustantivo, nombre de un árbol), haya (forma del verbo haber),halla (del verbo hallar) y aya (servidora doméstica).
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1-Haya. f. Árbol de la familia de las fagáceas, que crece hasta 30 m de altura, con tronco grueso, liso, de corteza gris y ramas muy altas, que forman una copa redonda y espesa, hojas pecioladas, alternas, oblongas, de punta aguda y borde dentellado, flores masculinas y femeninas separadas, las primeras en amentos colgantes y las segundas en involucro hinchado hacia el medio, y madera de color blanco rojizo, resistente y cuyo fruto es el hayuco.
Ejemplo: “…y apartando Ricote a Sancho, se sentaron al pie de una haya”. (D. Quijote, edición IV Centenario, pág. 962).
2-Haya. Del verbo haber, presente del subjuntivo. Se forma el pretérito perfecto: haya habido, haya viajado, haya tenido. Primera persona, yo haya, tercera persona el haya, usted haya.
Ejemplos: a) Sin que yo haya hecho nada, me están incriminando. b) “Cuando tú te hayas ido, me envolverán las sombras…” c). Cuando usted lo haya decidido, me avisa.
La forma verbal haya ha dado origen a distintas expresiones, como “mal haya sea”, la cual evolucionó en malhaya. Expresa disconformidad, disgusto o molestia con algo. “Mal haya sea, carajo…”, en tanto que “bien haya”, también interjección, es usada para bendecir o desear bien a alguien o algo.
Extrañamente, el Diccionario de la lengua española no registra la voz /malhaya/, sin embargo, aparece en textos de rancia hispanidad: “Oh, malhaya el caballero/ que sola deja a la niña/. Él se va a tomar consejo/ y ella queda en la montiña”. (La infanta encantada, romance). El vocablo sí aparece en el Diccionario de americanismos, obra de la Asociación de Academias de la Lengua Española. Cita ocho países cuyos hablantes emplean este término, pero no incluye a República Dominicana, donde mucho se usa.
3- Halla, de hallar.1. tr. Dar con alguien o algo que se busca. Sus sinónimos son: encontrar, localizar, ubicar, acertar, topar, tropezar.
Halla se emplea en presente del indicativo, tercera persona, él halla, usted halla. Ejemplos: a) Quien busca, halla. b) Él halla que yo no lo amo. c)¿Usted lo halla poco? d) A mí, el que me busca me halla, ah no.
4-Aya y el masculino ayo. Se denomina así a la persona encargada en las casas principales de custodiar niños o jóvenes y de cuidar de su crianza y educación. Es lo mismo que: niñero, institutriz, preceptor, educador, maestro, profesor, instructor, pedagogo, tutor, guía, mentor, institutor, dómine, amo, chacho, según el Diccionario académico.
Ejemplo: La aya se enfermó y no tenía con quién dejar el niño.
5-La Haya. Es el nombre en español de una ciudad de Países Bajos, donde se encuentra la Corte Internacional de Justicia, el principal órgano judicial de la Organización de las Naciones Unidas. Debate controversias entre Estados. Nada tiene que ver, semánticamente, con el verbo haber de nuestra lengua. Es voz femenina, se escribe con mayúscula por ser nombre propio.
Que bien le haya llegado este artículo, ya sea a la sombra de una haya o en un palacio de La Haya, y si no lo halla bien, haga lo que haya que hacer. Hasta el próximo domingo.