Fernando Tatis Jr. realiza una espectacular atrapada.
SAN DIEGO, AP.— Ya había sido una tarde difícil bajo el sol de finales de septiembre cuando Fernando Tatis Jr. hizo una atrapada tan espectacular para robar jonrones que provocó la ovación del público lleno y la admiración de sus compañeros de los Padres de San Diego.
La toma del campocorto convertido en jardinero derecho, que le negó al bateador emergente Michael Siani un jonrón de dos carreras, fue lo más destacado del domingo para los Padres, quienes estuvieron más cerca de la eliminación del panorama de los playoffs incluso cuando vencieron a los St. Louis. Cardinals 12-2 en su final en casa.
Juan Soto también tuvo un gran día, conectando un jonrón de 461 pies e impulsando cuatro carreras.
Mientras el zurdo Siani impulsaba un lanzamiento de Michael Wacha al jardín derecho en la sexta entrada, Tatis retrocedió, echó un rápido vistazo a la pared de 8 pies y cronometró perfectamente su salto, extendiendo su guante lo más que pudo para atraparlo.
Su hombro izquierdo estaba a la altura de la pared cuando devolvió el balón. Después de aterrizar y recuperar el equilibrio, y con sus rastas volando.
Fernando Tatis lanzó a primera para intentar doblar a Masyn Winn.
Tatis se quedó allí por un momento, hizo su baile característico mientras la multitud de 42.505 personas rugía y luego saludó a los fanáticos. Manny Machado, fuera de la alineación debido a un codo de tenista derecho, se paró en la barandilla del dugout, sonrió y levantó el dedo índice derecho en el aire. Wacha se ajustó la gorra y dijo: “Guau”.
“Oh, hombre, se sintió increíble. Me sentí como un superhéroe o algo así. Fue simplemente un gran momento”, dijo Tatis, cuyo manager, Bob Melvin, y sus compañeros de equipo creen que debería ganar un Guante de Oro.
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“Simplemente lo vi y dije que no lo iba a dar por sentado ni lo iba a dejar pasar”, añadió Tatis. “Iba a darlo todo. Creo que di un salto bastante bueno. Lo agarré justo al final con mi guante. Estaba emocionado, fue una locura y la multitud estaba ruidosa y fue simplemente un gran momento del béisbol”.
