Elvis Valoy
Horatio Argel, el creador del “American Dreams”, nunca se imaginó que su tesis sobre el ascenso social por la vía del trabajo y la superación excedería los Estados Unidos, y millones de seres humanos alrededor del mundo asumirían sus postulados, debido al mal trato en sus países, que en muchos casos les niegan hasta la más mínima subsistencia.
En estos días se ha puesto en boga las “ciudades santuarios”, que consisten en urbes estadounidenses que reciben autobuses repletos de inmigrantes ilegales persecutores del “sueño americano”, enviados desde la frontera norteamericana, lo que ha devenido en un dolor de cabezas, principalmente en Chicago y New York, originando un match entre la alcaldesa demócrata de Chicago, Lori Lightfoot, y el gobernador del estado de Texas, el ultraderechista Greg Abbott.
Estos autobuses reflejan la vergüenza de nuestros países, que con sus políticas económicas y sociales de espalda a la realidad, solo generan pobreza, ocasionando la migración de la gente. En los últimos meses han aparecido furgones atestados de migrantes sin papeles, entre los que se cuentan personas dominicanas, lo que de seguro genera preocupación en las autoridades norteamericanas.
La vicepresidenta estadounidense Kamala Harris se reúne hoy con el presidente Luis Abinader. Harris tiene la encomienda desde el inicio del gobierno de Joe Biden de abordar las raíces de la migración indocumentada a Estados Unidos, y para tal fin trabaja principalmente en el Triángulo Norte (Honduras, Guatemala y El Salvador), pero que sin embargo, no ha podido detener las caravanas centroamericanas que buscan penetrar a territorio norteamericano.
Sin perder su objetivo, la número dos estadounidense se concentra en poner un “pare” al éxodo ilegal hacia Norteamérica, y dudo que el presidente Luis Abinader logre que ella dé un giro y “mire” hacia la migración haitiana que cruza a nuestro país.
