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Mano a Maduro

Mano a Maduro

El presidente de Brasil, Lula da Silva, afianzó su liderazgo en Suramérica con la cumbre que convocó para definir la integración y las relaciones entre los países de la región.

Sin embargo, la mano que echó a su colega de Venezuela, Nicolás Maduro, aunque con la advertencia de que de él dependerá que en la nación se celebren elecciones libres en 2024, no caló en todos los participantes.

En su defensa de Maduro, el mandatario brasileño consideró que se trató de un error político el reconocimiento a un gobernante inexistente como Juan Guaidó.

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Ese señalamiento no causó fricciones como la afirmación de que Maduro había sido víctima de una narrativa. Los presidentes Gabriel Boric, Chile, y Luis Lacalle Pou, Uruguay, expresaron que los derechos humanos no son una narrativa. Bajo el régimen de Jair Bolsonaro las relaciones entre Brasil y Venezuela se redujeron a su mínima expresión.

La crisis de Venezuela forma parte de los factores que contribuyeron a interrumpir el proceso de integración que busca retomar Lula.

Advirtió, empero, que en manos de Maduro está que Venezuela haga su propia narrativa y que vuelva a ser un país soberano.

El Nacional

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