La Procuraduría General de la República estableció que la pastora Rossy Guzmán Sánchez presenta un aumento exorbitante e injustificado en su patrimonio.

Según consta en el acta de allanamiento emitida por la Coordinadora de los Juzgados de la Instrucción del Distrito Nacional, la pastora Rossy Guzmán habría acumulado ese patrimonio a través de la administración de bienes que pertenecen al mayor general Adams Cáceres Sirvestre, quien es sindicado como el líder de la red de corrupción.

Rossy Guzmán habría utilizado supuestamente empresas y personas de su entorno como testaferros para ocultar propiedades del alto oficial, como es el caso de su hijo Tanner Antonio Flete Guzmán y otros.

El Ministerio Público estableció que Guzmán Sánchez, conjuntamente con los imputados Flete Guzmán, Rafael Núñez De Aza y Raúl Alejandro Girón prestaron sus nombres y administraban bienes al mayor general Cáceres Silverio, en violación a la Ley de Lavado de Activos.

El 22 de enero pasado la gerencia de Investigación de Fraudes y Delitos Tributarios emitió un informe en donde se evidencia la transferencia de tres propiedades inmuebles en Colina del Oeste por parte de la razón social Único Real Stete e Inversiones SRL, luego de que el Ministerio Público iniciara la investigación.

En tanto que, según el Ministerio Público, el mayor general Cáceres Silvestre ocultaba bienes producto del enriquecimiento ilícito y falseó declaraciones juradas en violación a la Ley 311-14 sobre Declaración Jurada de Patrimonio.