
El maestro Ramón Orlando Valoy junto al director Ilya Markeev durante uno de los ensayos con la Orquesta Sinfónica del Conservatorio de Música de Moscú que interpretará esta noche 10 merengues con arreglos sinfónicos.
Esta noche, el maestro Ramón Orlando Valoy asumirá uno de los retos más importantes de su carrera artística al presentarse por primera vez en Rusia, un país con una profunda tradición musical.
Lo hará junto a la prestigiosa Orquesta Sinfónica del Conservatorio de Música de Moscú, en un evento que promete ser histórico, ya que se trata de un evento único: “Merengue Sinfónico”, a las 7:00 de la noche.
El lugar elegido para este concierto es la emblemática Sala de Conciertos P.I. Tchaikovsky del Conservatorio Estatal de Moscú, una de las instituciones musicales más importantes de Rusia, que será el escenario de este ambicioso proyecto que fusiona la tradición del merengue con el refinamiento de la música sinfónica.
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Esta combinación de dos mundos musicales tan distintos, pero igualmente poderosos, se convierte en un homenaje a la riqueza de la cultura musical de la República Dominicana, y al mismo tiempo, una plataforma para estrechar los lazos entre las dos naciones.
“Merengue Sinfónico” es una iniciativa que tiene como objetivo presentar el ritmo caribeño más popular a través del lenguaje académico de la música sinfónica, y Ramón Orlando Valoy, reconocido músico y arreglista dominicano, es el encargado de dar vida a esta propuesta.
Como invitado especial del concierto, Valoy no solo interpretará algunas de sus composiciones en el piano, sino que también ha preparado los arreglos instrumentales de las piezas de merengue que serán interpretadas por una impresionante formación musical internacional compuesta por 77 músicos rusos y seis dominicanos.
El repertorio del concierto incluye una selección de 10 canciones clásicas del cancionero merenguero, que serán presentadas con nuevos arreglos sinfónicos, con la interpretación de la Orquesta Sinfónica, bajo la dirección artística de Vyacheslav Valeev y el director Ilya Markeev.
Las canciones que formarán parte del programa incluyen grandes éxitos del merengue, como Compadre Pedro Juan (Luis Alberti); Juanita Morel (Bilo Henríquez), Te quiero (Ramón Orlando); Déjame volver (Feliz Cumbé), El negrito del Batey (Luis Kalaf); Sin ti soy nada (Melvin Rafael), El Guardia del Arsenal (Luis Días); Sisi y Ricardo (Ramón Orlando), Bailando (Ramón Orlando) y La agarradera (Luis Pérez).

El evento se lleva a cabo en el marco de dos importantes celebraciones para la República Dominicana: el 181 aniversario de su independencia y los 80 años del establecimiento de relaciones diplomáticas entre la República Dominicana y Rusia.
Este concierto será sin duda un hito cultural en la historia de la diplomacia dominicana en el extranjero, al ser considerado uno de los eventos más significativos en el ámbito musical organizados por la embajada dominicana en Rusia.
En total, 84 músicos estarán en escena, entre ellos los seis dominicanos Francisco Pérez (tambora), Máximo Núñez (trompeta); Humberto Flores (güira), Bolívar Pérez (conga); Julio César Féliz (bajo) y Enriquillo Pimentel (saxofón alto).
Diplomacia cultural
El embajador de la República Dominicana en Rusia, Alejandro Arias Zarzuela, ha destacado la importancia de este concierto como una herramienta para revitalizar las relaciones culturales y turísticas entre ambos países.
Se recuerda que antes del conflicto bélico con Ucrania, Rusia era el segundo país emisor de turistas hacia la República Dominicana. En ese contexto, la embajada busca reavivar la imagen del país en la memoria colectiva de los rusos y promover el turismo, con la esperanza de que se restablezcan los vuelos directos entre ambos países.
En palabras de Arias Zarzuela, “hemos conformado este evento precisamente para mantener en el ideario colectivo de este país a la República Dominicana y sus expresiones culturales, y qué mejor forma de hacerlo que con nuestra música”.
Este proyecto nace en Brasil, cuando el embajador Arias Zarzuela era representante diplomático en ese país y mantuvo una relación cercana con el destacado músico brasileño Claudio Cohen, entonces director de la Orquesta Sinfónica de Brasil, quien se convirtió en un gran defensor de la música latinoamericana.
Fue durante una conversación entre Arias Zarzuela y Cohen que surgió la idea de realizar un concierto de merengue instrumentado para orquesta sinfónica, y el maestro Cohen lo consideró una propuesta maravillosa.
A partir de ahí, el embajador empezó a buscar músicos con la capacidad de transformar la música popular dominicana en piezas sinfónicas. Ramón Orlando y el embajador ya se conocían desde 2017, y fue en 2019 cuando finalmente lograron llevar a cabo este proyecto en Brasil, con el apoyo de varias instituciones y patrocinadores.
El éxito rotundo de esa primera presentación en Brasil, con más de 700 personas en una sala con capacidad para 500, consolidó la idea de repetir el evento en otras partes del mundo. Hoy, esta historia llega a Rusia, en una sala de conciertos que tiene tres espacios de distinta capacidad, siendo el elegido el de 1,700 personas, donde se espera que la magia del merengue y la sinfónica cautiven al público moscovita.
Apoyo institucional
El concierto en Moscú es posible gracias al apoyo de instituciones claves como el Banco de Reservas, que ha sido un sponsor fundamental del proyecto. Además, el ministro de Relaciones Exteriores de la República Dominicana, Roberto Álvarez, ha dado su respaldo al evento, destacando la relevancia de la diplomacia cultural para fortalecer los lazos entre naciones.
El apoyo del presidente Luis Abinader y de Antoliano Peralta, quien fue parte fundamental de la realización de este evento, también ha sido crucial para convertir este sueño en realidad.
Esta noche, el «Merengue Sinfónico» no solo será un concierto, sino un puente cultural que une dos mundos aparentemente distantes, pero que se encuentran a través del lenguaje universal de la música.
Para Ramón Orlando, este evento representa un logro de gran trascendencia, mientras que para la República Dominicana, es un motivo más de orgullo en su permanente esfuerzo por difundir su rica cultura en el extranjero.