No se ve todos los días por estos predios, la presentación de un artista de la talla del rockstar, Rod Stewart, por lo que no es sorpresa que Altos de Chavón fuera abarrotada en su totalidad (incluyendo los pasillos) por miles de personas.
Lo bueno no pasa de moda, y la música del artista británico, es un ejemplo palpable de esto.

Su energía, puntualidad, y en especial su repertorio, hicieron que la fecha del pasado sábado se quedara grabada en la memoria de los asistentes.

Con las tonadas de Infatuation, las piedras de Chavón comenzaron a vibrar puntual, a las 8:30 pm, ni un minuto más, ni uno menos, en una noche nublada, cuya única estrella que brillaban en ese momento estaba en el escenario.

Having Party, Some guys, It takes two, Wear it well, Ever seen the rain, Forever young, First cut y Maggie, son algunos de los temas que intérpretó el músico de 78 años, alternando lo romántico con la fiesta, y unas que otras dedicatorias.

A medida que avanzaba el recital, las estrellas comenzaron asomarse para también ver brillar la leyenda del rock and roll que tenía a miles a sus pies, bailando y ovancionándolo, pues sin duda alguna, el músico, compositor y productor británico de rock se mantiene como el buen vino.

Conversador, relajado, chistoso y bailarín, así se le vio al ex vocalista de The Jeff Beck Group, en cuyo honor de Jeff Beck, quien falleció el pasado 10 de enero de 2023, en Sussex Oriental, Reino Unido, le dedicó Rather go blind.

Vestido con los tonos de la bandera de Ucrania, azul y amarillo, Stewart, continuó en la línea de dedicatorias, con el tema Rhyth of my heart, en apoyo al referido país, mientras detrás suyo, en pantalla gigante, se proyectaba imágenes de la batalla, los refugiados, y la devastación que ha dejado la misma en la nación europea.

Este es el himno de Rod contra los enfrentamientos, pues fue escrita por la guerra de Vietnam, pero que el artista dice se puede relacionar con cualquier conflicto.

El concierto de una hora 45 minutos, en el que sus músicos también se robaron el show, con su talento vocal y musical, culminó con la energía a millón, con un viaje a Studio 54, con el tema Da Ya Think I’m Sexy.

Bajo la producción de SD Concerts, del empresario artístico Saymon Díaz, el primer concierto de Stewart en República Dominicana, en resumen se podría definir con las palabras, espectacular e impecable.