República Dominicana es uno de cinco países en el mundo que han anunciado la administración opcional de una cuarta dosis de vacuna que fungiría como un segundo refuerzo contra la covid-19, que se aplicaría en principio a personas vulnerables, personal de salud, militares, policías, docentes y periodistas.

Además de esa cuarta inoculación, aplicable también a toda persona que la requiera por tener alguna condición especial, el Gobierno dispuso que a partir del 31 de enero los adultos mayores de 18 años deberán presentar su tarjeta o certificado de vacunación con el esquema completo de tres dosis.

A pesar de la escalada de contagios provocada en todo el mundo por la variante ómicron, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aún recomienda un máximo de tres vacunas como forma de disminuir los riesgos de infección o reducir sus efectos.

El país se unió a Israel, Chile, Uruguay y Brasil como las únicas naciones que aplicarán en lo inmediato una cuarta dosis de refuerzo, aunque las autoridades dominicanas subrayan que es opcional y a grupos poblacionales previamente identificados.

Aunque el contagio de ómicron ha operado como retorno del gran oleaje pandémico en Europa, Estados Unidos y Latinoamérica, expertos sanitarios resaltan que la incidencia disminuirá progresivamente, como ha ocurrido en Sudáfrica, donde surgió esa variante de la covid-19.

El Ministerio de Salud notificó ayer 649 casos positivos y cinco fallecimientos, ominosa señal de que aquí también se avecina otro rebrote pandémico, cuya consecuencia, además de más internamientos y decesos, sería un notable ausentismo laboral con graves repercusiones sobre la economía.

En medio de la barahúnda desatada en todo el mundo sobre cómo afrontar la acelerada propagación de la variante ómicron se aconseja recibir con serenidad y buen juicio el anuncio oficial sobre una cuarta dosis opcional y limitada, así como la obligatoriedad de completar tres inoculaciones contra el coronavirus.

La población está compelida a exhibir moderación durante las festividades de Año Nuevo, evitar aglomeraciones, usar mascarilla en todas partes, mantener distanciamiento y lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, la mejor manera de afrontar el tsunami ómicron.