El presidente de la Unión Nacional de Empresarios (UNE), consideró que resulta imperativo que los agentes económicos del país conozcan los ajustes y el alcance que en la cadena de valor de negocios deberán realizar para poder adherirse al sistema de facturación electrónica, tras ser aprobado en el Congreso Nacional.
Miguel Daujhare, subrayó que el proyecto de ley establece la obligatoriedad de la facturación electrónica, y si bien contribuirá a la agilización y la transparencia de los negocios en el pago de impuestos, por su imposición demandará que cada agente económico y ente empresarial acometa cambios en el proceso de sus transacciones.
“Por cuanto en la UNE esperamos que la misma sea lo suficientemente flexible y se adapte a la realidad del tejido empresarial dominicano, de manera que no contribuya al aumento de la informalidad que caracteriza a gran parte de los negocios en la República Dominicana”, dijo.
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El presidente de la UNE habló al inicio del conversatorio Eficiencia Administrativa y Cumplimiento Tributario, con la participación de Luis Valdez Veras, director general de Impuestos Internos (DGII) en calidad de orador invitado, en el salón Churchill, del Hotel Intercontinental.
La falta de educación tributaria y la complejidad de los procedimientos para el registro de los contribuyentes en la Dirección General de Impuestos Internos y para la declaración y pago de los impuestos, se erigen en una fuerte barrera que dificulta la ampliación del universo de contribuyentes y debe ser superada.
De acuerdo con el dirigente empresarial, el sistema tributario dominicano padece de debilidades estructurales que es preciso superar para asegurar la recaudación de los recursos que requiere el Estado dominicano, de forma y manera que pueda cumplir con sus compromisos, impulsar el desarrollo nacional y garantizar el suministro de los servicios básicos que requieren los ciudadanos.
En esa línea de pensamiento, planteó la pertinencia de que en el próximo año 2024 las autoridades que resulten victoriosas en los comicios presidenciales, independientemente del partido o candidato que sea, se aboquen a impulsar una reforma fiscal que optimice la redistribución de la asignación de recursos y acelere el ritmo del crecimiento económico.
“Existen aspectos interrelacionados que consideramos vitales y que no se deben obviar cuando se discuta la referida reforma, particularmente en lo atinente a la reducción de la evasión, a la ampliación el universo de los contribuyentes y a la simplificación de los procedimientos para facilitar el cumplimiento de parte del sujeto pasivo”, dijo.
