Joseph Manuel Abreu habla junto a otros directivos de la agrupación cívica.
El miedo de los políticos dominicanos a ser perseguido ya sea por adquirir bienes ilícitos o cuando abandonen el poder han sido los principales escollos para la aprobación de la Ley de Extinción de Dominio, afirmó esta mañana el coordinador nacional de Participación Ciudadana (PC).
Joseph Manuel Abreu, al mismo tiempo recordó que la pieza es orgánica y que el hecho de que el oficialista Partido Revolucionario Moderno (PRM) tenga mayoría en ambas cámaras no garantiza por si solo que sería refrendada, pues para ello se requiere de las dos terceras partes de los presentes en el hemiciclo.
Dijo que los políticos dominicanos en sentido general ven afectados sus intereses con la iniciativa y por eso la rechazan.
Agregó que los políticos deben centrar el debate en establecer los controles para evitar que la pieza sea utilizada como un instrumento de persecución política.
Abreu enfatizó que “no es un tema de partido es más un rechazo de la clase políticas, o sea hay muchos intereses que se entienden afectados en la clase política, sin distinción de partido y eso origina cierta resistencia en algunos casos evidente y en otra con ausencia que limitan este tipo de iniciativa”.
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Añadió que “también es bueno resaltar que esta ley es orgánica y que va a requerir una mayoría calificada para ser aprobada, por consiguiente el hecho de que el partido oficialista tanga mayoría y pueda tal vez imponerse en la comisión bicameral para que esto salga como un proyecto de ley directamente a las cámaras, probablemente no tenga la mayoría o no reúna mayoría si no lo hace por consenso en la comisión, probablemente no logre la mayoría para aprobarlo en el pleno de las cámaras”.
Abreu dijo que entre los puntos que han provocado debates, el tema de la retrospectividad podría tener algún fundamento, pero que en el caso de gravar la elusión fiscal como plantean los partidos de la Liberación Dominicana (PLD) y la Fuerza del Pueblo, no tiene ningún tipo de asidero.
Calificó como un chantaje los intentos de gravar la elusión fiscal y dijo que esto no tiene base ni jurídica ni de ningún tipo.
“El introducir el tema de la elusión fiscal es más para boicotear porque eso no tiene asidero ni jurídico ni legal”, dijo el coordinador nacional de Participación Ciudadana.
Añadió que “la clase política en general tiene temor porque hoy está el PRM, pero mañana puede estar otro y esto es una herramienta que va a quedar ahí y ellos tienen el temor de que tal vez pueda ser utilizado como un arma de persecución política, entonces yo creo que el debate más que en lo que ellos plantean debe centrarse ahí en incluir al proyecto los controles para evitar que sea usado ya sea con fines políticos o ya sea con fines abusivo tal vez por el Ministerio Público contra cualquier funcionario, entonces deben centrar el debate en ese punto y no deben contaminarlo con temas que no vienen al caso y que no tienen asidero”.
Explicó que en la Ley de Extinción de Dominio no existirá la retroactividad, sino la retrospectividad porque se trata de una ley civil que buscará recuperar los bienes obtenidos de forma ilícita, y no perseguirá a las personas.
“La ley no afecta a la persona, afecta al bien y de la ilegalidad no nace derecho, en ese sentido si usted adquirió un bien de manera ilícita hace diez años, hace veinte años, la ilegalidad sigue porque el bien está contaminado. Ya el bien nació contaminado desde hace un tiempo”, sostuvo.
De su lado el presidente del Senado, Eduardo Estrella, afirmó que la Ley de Extinción de Dominio será discutida y aprobada próximamente.
“Yo lo único que les pido, es que esperen en los próximos días que todo, como debe ser en el Congreso, se va a dirimir y se va a conocer en las comisiones y en el hemiciclo que es quien tiene la última palabra”, aseguró.
Destacó que la sociedad dominicana demanda transparencia; que se combata la corrupción, el narcotráfico y el lavado de activo.
Ayer el presidente Luís Abinader aseguró que en las próximas semanas la pieza sería aprobada por los legisladores, posición que fue compartida por el presidente del Senado.
