Son de espanto y brinco las supuestas irregularidades por más de 43,200 millones de pesos detectadas por la Cámara de Cuentas en una auditoría que abarca desde el 16 de agosto de 2010 hasta el 16 de agosto de 2020, en la eliminada Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe).
Las irregularidades se habrían dado en los procesos de compras y equipamientos de hospitales que la Oisoe acordó con la empresa Domedical Supply, propiedad de Alexis Medina, principal imputado en el escándalo de corrupción denominado Antipulpo.
Cesiones que exceden el porcentaje permitido, contrataciones que no cumplen con las condiciones de excepción y sin evidencia previa de certificación de fondos y otras supuestas irregularidades conforman el rosario de violaciones que cita la Cámara de Cuentas.
Como si hubiera algún interés en llamar la atención, el presidente de la entidad, Janel Andrés Ramírez, resaltó que el organismo está comprometido con hacer “público lo público y mostrar el resultado de la fiscalización”.
Con hermanos, cuñados, colaboradores y los jefes de seguridad en prisión vinculados a escándalos de corrupción, los resultados de la auditoría focalizarán más la mirada sobre el expresidente Medina.
Si bien la Cámara de Cuentas no hace más que cumplir con su función cabe esperar que se avance en otras auditorías que se han solicitado en entidades en que se han denunciado escándalos de corrupción.
