De acuerdo con el presidente del Consejo Nacional de la Unidad Sindical (CNUS), Rafael Abreu, el panorama no está tan despejado en torno a la reforma del Código Laboral.

A diferencia del optimismo del ministro de Trabajo, Luis Miguel De Camps, el sector empresarial y el sindical difieren sobre varios puntos.

Uno de ellos, según Abreu, es la oposición de la parte sindical a la intención de los empresarios de aumentar de tres a seis meses el periodo de prueba del nuevo trabajador.

Abreu aclaró que también existen desacuerdos en torno a la jornada laboral, el despido de las embarazadas y otros aspectos.

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Con el tiempo que llevan las discusiones es para que se supere el diálogo de sordos y se comprenda la necesidad de ceder en los aspectos que benefician al empleado sin perjudicar al empleador.

Si el código es tan importante para incrementar las inversiones, fomentar el empleo y mejorar las condiciones de vida del trabajador las partes tienen que hacer más para tender puentes sin crear falsas expectativas.

El Ministerio de Trabajo tendrá que emplearse más a fondo para despejar los obstáculos que impiden consensuar el Código Laboral.