Por: Pedro Castro

Con quién o quienes podrán contar los inculpados que caigan en manos de jueces pro Ministerio Público o de magistrados que traten de cubrirse la espalda por presión social o por temor a fiscales?

Hablamos de jueces que aplican la justicia, injusticia o justicia complacida. Si no se aplica la ley, el Cristo que figura en estrado, tendrá que pasar balance y juzgar a los juzgadores, si de eso se tratare.

Nunca he entendido las autodesignaciones, que dicho sea de paso hicieron famoso a un juez que hoy está en el Constitucional, que realizan los coordinadores de los juzgados de la instrucción para “conocer” casos de transcendencia pública.

En el más reciente, la magistrada Kenya Romero, se autoasignó el caso Coral 5G y fue recusada por la defensa del General De los Santos Viola, encontrándose sujeta a la decisión del Juez Julio Cesar Canó Alfau, quien también complace a plenitud a los fiscales.

Otra de las Juezas complacientes , según sus descisiones, es Solange Vásquez, que presidía el Cuarto Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional, quien fue apoderada para revocar el archivo definitivo otorgado al economista Andres Dauhajre (Andy), por presuntas irregularidades vinculadas a la termoelléctrica Punta Catalina. La Jueza complació al Ministerio Público en su petición, sin embargo, el pasado 24 de noviembre la primera Sala Penal de la Corte de Apelación revocó la sentencia y confirmó el archivo definitivo en favor del economista , con el voto disidente de la magistrada Ramona Vásquez.

Vásquez por igual fue designada para la revisión de medidas de coerción del caso Medusa confirmando y complaciendo al Ministerio Público en sus peticiones el pasado 13 de octubre, caso en el cual se encuentra investigado y privado de libertad el citado ex procurador general de la República Jean Alain Rodríguez.

Otro de los Jueces sindicado de complaciente es Canó Alfau. También Janibet Rivas Méndezl, asignada para el Caso Pulpo, en el cual se encuentra involucrado Alexis Medina, hermano del ex presidente Danilo Medina y Fernando Rosa, ex presidente del Fonper, entre otros.

Varios abogados han sostenido que no existe proporcionalidad con las medidas de coerción, violándose la presunción de inocencia, dado que los imputados pueden ser investigados en libertad. Un ejemplo palpable y de gran connotación fue el voto disidente en el caso Odebrecht, el más grande de corrupción visto en nuestro país por la pasada Jueza Presidenta de la Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) y hoy procuradora general de la República, la distinguida amiga y respetada Miriam German Brito, quien en su sentencia votó por la libertad de todos los imputados del caso mientras se investigaba, siendo todos liberados tras ese voto de la jueza de la entonces jueza de la SCJ.

Los abogados de la defensa de estos y otros casos de corrupción han expresado su indignación al observar la camaradería, complacencia y hasta supuesta complicidad de los jueces y los fiscales de los casos de corrupción al grado de que aparentan estar en conversaciones de mensajes o chats fiscales y jueces, durante las audiencias. ¿Estarán acordando a quién le dan prisión y a quien no?. Oh diosa Themis donde estará, con ese de ese tipo de jueces. Que se aplique la ley por Dios, por encima de todo, sino tendremos de pedir al Chapulin, para que nos salve.

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