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Lavaderos informales se propagan por el GSD

Lavaderos informales se propagan por el GSD

Jóvenes lavan vehículos en la calle República Ecuador, esquina Independencia, en los llamados kilómetros del Distrito Nacional. Jorge González

Los lavaderos informales de vehículos se expanden como  verdolaga por  calles y avenidas del Gran Santo Domingo, desparramando agua sin control, ante  la indiferencia  de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), los ayuntamientos y la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett).

 Los propietarios de estos lavaderos, “car wash”, utilizan   potentes máquinas para succionar el agua a utilizar, lo que genera contaminación sónica que afecta a los vecinos en esos lugares.

El denominador común de estos:  la  utilización de  las áreas verdes y las aceras para sus operaciones.

Estos negocios usan dos mecanismos para suplirse de agua: mediante conexiones  irregulares en los sistemas de tuberías y la instalación  de tinacos que, a su vez, son abastecidos por camiones cisterna.

Los lavaderos informales de vehículos se expanden como  verdolaga por  calles y avenidas del Gran Santo Domingo, desparramando agua sin control, ante  la indiferencia  de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), los ayuntamientos y la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett).

En uno que otro de estos lavaderos se emplean jóvenes, que por el lenguaje soez en que se comunican, se podría deducir que tienen  bajo nivel académico.

La CAASD, en sus principios, tiene por misión trabajar con la población del Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo para brindar servicio de agua potable, recolección y saneamiento de las aguas residuales, cubriendo sus necesidades y contribuyendo al cuidado del medio ambiente. Por ello, es impostergable que esa entidad intervenga  para detener esa mala práctica, que aunque genera empleos informales para miles de personas, no deja de ser una piedra para el consumo del agua.

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Estos lugares para lavar autos en calles y avenidas causan  serios trastornos en el tránsito, ya que los vehículos son lavados  en las  vías públicas.

Algunos residentes en sectores donde operan  estos lavaderos se quejan del  hedor a orina y materia fecal  por no contar con  instalaciones sanitarias, agregando también que algunas acciones atentan contra el  pudor y las buenas costumbres.

 Frente al Plan Piloto, en el sector de Honduras, al sur del Distrito Nacional, en un breve recorrido logramos identificar  cinco de esos “car wash”, instalados muy cerca entre sí.

Frente al Plan Piloto varios conductores llevan sus vehículos a lavar el fin de semana.

 Allí sus residentes dicen estar cansados de denunciar ante las autoridades competentes estas operaciones. Se niegan a identificarse con temor a represalia.

En la calle Paseo del Yuna, en  Los Ríos, Distrito Nacional, un lavadero tiene años funcionando en la propia vía, convirtiendo en un caos el tránsito en la zona. A  unos 300 metros de distancia, pero en la calle D del mismo sector, la historia se repite y unos 10 jóvenes ofrecen sus servicios a 250 pesos, precio similar a los lavaderos formales.

Una oficial

En la calle 20 esquina Primera, en  Villa Aura,  Santo Domingo Oeste, funciona un lavadero, donde se estacionan sin control vehículos frente a los residenciales. Al igual que otros barrios, los vecinos han solicitado, mediante cartas, la intervención de la alcaldía del municipio, sin obtener resultados.

En este “car wash”, que supuestamente tiene como una copropietaria a una oficial del Ejército de la República Dominicana, utiliza maquinarias que emiten un fuerte  ruido. Esto sin mencionar la  basura que dejan los clientes y los lavadores en esa vía. Según algunos consultados, cuyos nombres se omiten por seguridad, este negocio y otros   operan con   apoyo de la alcaldía.

SDE

Quien transita por la cercanía del Hipódromo V Centenario, notará de inmediato la gran cantidad de  lavaderos. Los viernes, sábados y domingos, se observan largas filas de vehículos en calles que sus dueños procuran asear. En las avenidas San Vicente de Paul,  Mella,  Venezuela y Sabana Larga, el drama es parecido.

  Hace varias semanas, que el ayuntamiento de ese municipio realizó un operativo para terminar con los lavaderos informales, pero solo se limitó próximo al Faro a Colón, donde funcionaban unos 15.

No obstante, el pasado fin de semana, aunque en menor proporción, se observó varios hombres lavando vehículos a clientes, en especial conductores del transporte público y taxistas.

Pionero
En la calle Oscar Santana, entre los sectores La Ciénaga, Guandules y Guachupita, Distrito Nacional, desde hace años funcionan varios negocios de lavado de vehículos. Y aunque han sido sacados de allí, días después retornan.

Ronny Mateo

Confiando en una sociedad más justa. Periodista de larga experiencia