Casi todo el mundo en la zona ha visto o probado este hongo, que ha sido utilizado por generaciones para enriquecer platos locales. / Foto: Duany Núñez
La gastronomía de la zona fronteriza de República Dominicana es un reflejo de su historia, geografía y mezcla cultural, que captura la esencia de su interacción con Haití y aprovechamiento de los recursos locales.
Un ejemplo de ello es el yonyón un hongo comestible cuyo nombre proviene del créole Djon djon. En Haití es considerado un alimento gourmet con alta demanda pese a su poca oferta.
En suelo dominicano, este hongo tiene mayor presencia en la Hoya de Enriquillo, en la provincia Independencia, especialmente en El Limón y en Duvergé, a esta última comunidad se trasladó un equipo de El Nacional para conocer y probar este alimento poco conocido en otras regiones del país.
En esa parte fronteriza, preparar platos con este hongo es una tradición que lleva consigo siglos de herencia culinaria.
Para los dameros, extraño gentilicio de los originarios de Duvergé, el “moro de yonyón”, elaborado con arroz, leche de coco y el hongo protagonista, es uno de los platos más consumidos y considerado toda una explosión de sabor al paladar.
Así lo aseguró Jesús Ramos, un chef aficionado oriundo de dicho municipio y propietario de Ramada Restaurant, donde esta comida es aclamada por sus clientes cuando la producción lo permite.
“Es un sabor fuerte, intenso. El yonyón generalmente se prepara con coco y da una explosión de sabor”, dijo.
Y es que, aunque este alimento. endémico de esta parte del país, goza de gran aceptación entre comensales, su consumo se ve limitado debido a su naturaleza silvestre, por lo que comercializar el yonyón en grandes cantidades es un desafío. Su producción depende completamente de las condiciones climáticas.
“El yonyón es un hongo que se produce en la humedad, cuando llueve y bajo un clima cálido. Crece en la madera cuando tiene cierto tiempo de cortada y en proceso de putrefacción. La curiosidad es que se produce cuando llueve nada más y en esta zona llueve poco”, explicó Ramos al destacar que esta peculiaridad impide que este hongo se pueda cosechar en grandes cantidades.
“Generalmente no he visto todavía que se produzca de una forma comercial, aunque sí se vende cuando las condiciones climáticas se dan para que éste nazca de forma silvestre”, agregó.
Preparación
De acuerdo a Ramos, la preparación del moro de yonyón no es tan complicada, al hongo se le retira la raíz, quedando solo una parte del su delgado tallo y la sombrillita, debe ponerse a secar ya que, para cocinarlo debe estar seco.
Un característica favorable de este alimento es que, una vez seco, su conservación es perdurable, por lo que muchos aprovechan las temporadas de lluvia para adquirirlo, guardarlo y consumirlo en porciones.
Para preparar el moro o locrio de yonyón no se necesitan muchos ingredientes, además de que lo ideal es mantener el sabor del hongo y el coco como elementos principales.
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Se necesita preferiblemente “ajo, ajíes gustosos y verdes, cilantro, sal y listo. Primero hay que dejarlo hervir, cocerlo junto al coco y verter el arroz”, detalló Ramos.
Indicó que durante la cocción el arroz toma un color parecido al moro de habichuelas negras, y por eso es conocido como moro de yonyón.
Suele acompañarse con carne de chivo o pollo, pero la realidad es que muchos lo comen solo pues, el exquisito sabor del plato no amerita de nada más.
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Por su experiencia culinaria, destaca Jesús Ramos que casi todo el que ha probado este plato le ha gustado, incluyendo destacadas figuras del país que han visitado su restaurante.
EL DATO
Las Antillas
El yonyón es un excelente sustituto de la carne. Además de Haití y República Dominicana, se han reportado producciones de este hongo en Cuba, Dominica, Guadalupe, Martinica y Trinidad.